Virgilio

Nombre: Dimitry Petrov, más conocido como “Virgilio”

- Edad: 130 años

- Especie: Hechicero versado en las artes de la Nigromancia

- Clase Social: Media

- Avatar (Nombre del Famoso): Roy Khan

- Lugar de Origen: Rusia

- Poderes: El arte de la magia es como un don para él. Después de años de estudio, la rama de la nigromancia atrajo su atención. Gracias a ella, domina los secretos de la vida y la muerte.

- Descripción Física: Pelo corto moreno, facciones cuadradas y duras que dan la sensación de que siempre esté serio. Su piel es algo tostada y parece desmentir su origen ruso. Sus ojos son de color marrón y siempre muestran severidad.

- Descripción Psicológica: Dimitry no tuvo una infancia fácil. La ausencia de figuras paternas convirtió la inocencia de un niño pequeño en una crueldad desenfrenada y sin parangón. Sus conocimientos en nigromancia le enseñaron a respetar la muerte pues ella formaba parte de sus herramientas en el arte oscuro. Frío y calculador, siempre intenta ir un paso por delante de su adversario.

- Orientación sexual: Heterosexual

- Historia (más de 6 renglones): Huérfano a temprana edad. Con poco más de 6 años, un Dimitry impasible observaba como la casa en la que había vivido durante toda su vida ardía en todos sus cimientos. Las llamas brotaban de las ventanas y el tejado, y lamían la madera con sus lenguas de fuego. El incendio estaba descontrolado. Los cadáveres de sus padres yacían calcinados a pocos pasos de la puerta principal, su salvación. ¿Qué había pasado? Dimitry solo recordaba una absurda discusión entre padre e hijo, odio e ira concentrada hacia una misma persona que al instante estalló en llamas. El pequeño solo pudo correr hacia la salida antes de que el fuego se hiciera con toda la casa.
Sobre el niño, copos de ceniza caían como si estuviera nevando la oscuridad que ahora reinaba en su corazón.
Una mano apareció de las sombras hasta llegar al hombro de Dimitry. Un hombre con túnica, encapuchado, había aparecido junto al pequeño homicida.
-Un final atroz para un par de estúpidos ciegos- el niño le miró sin comprender- Ciegos por no ser capaces de ver un diamante en bruto como tú, hechicero. Ven conmigo y te puliré para que esto no vuelva a suceder- ¿en realidad Dimitry no quería que volviera a suceder? Los gritos de agonía de sus padres habían despertado un instinto sádico que un niño no debería tener. Pero si llegaba a dominar aquello… ¿no sería más fácil saciar aquel nuevo apetito que había nacido en él? El pequeño asintió sin decir nada- Desde hoy serás conocido como Virgilio, Virgilio el hechicero…- Virgilio el Oscuro sería su nombre, pues el pobre insolente que había decidido adoptarlo no había supuesto que su joven aprendiz se volvería algún día contra su maestro. Y así fue, una vez aprendido todo lo que el mago le podía enseñar, el aprendiz se deshizo de su maestro utilizándolo para crear su primer muerto viviente, así comenzó su etapa como Nigromante.
Durante su aprendizaje en la magia, Virgilio conoció a Alexandr Volkov y a Nikolay Romanov, más conocidos como Devir y Masoj.
Cuando Virgilio superó al maestro él pasó a ser un “cabecilla” para el grupo de tres amigos. El grupo, por exigencias de Virgilio, se adentró en el oscuro mundo de la Nigromancia. El único que parecía disfrutar con aquel arte era Virgilio. Aquella magia conseguía apaciguar su sed de sangre y mantenía su enérgica mente ocupada. Pero quería más, quería más poder y solo el Necronomicon podía cumplir sus deseos. El libro más poderoso de la necromancia debía ser suyo y así fue años después.
En la mente del Nigromante aún se encuentra grabado el recuerdo de los tres amigos junto a la tumba de Abdul Al-Hazred, cuyas esqueléticas manos sostenían el ansiado grimorio. No era un libro espectacular, solo se trataba de un libro mediano tapizado en cuero sin decoraciones ni titulo. Solo podía destacarse por un cierre en forma de hebilla que encerraba todo su poder.
Podría haber sido un final muy feliz para los tres hechiceros, de no ser por el miedo que inspiraba aquel libro a dos de ellos. Cada día que se enfrascaban en la lectura del grimorio Masoj se encontraba más inseguro y nervioso. Se estaba introduciendo en un nuevo mundo que no quería conocer. El pánico que le infundía la ira de Virgilio le llevó a la estúpida decisión de salir huyendo. Virgilio no le dio cuartel, no podía dejar que Masoj se marchara conociendo secretos del Necronomicon. Dejado el grimorio en posesión de Devir, al cual le creía fiel de corazón, fue en busca de Masoj para acabar con su vida. Devir, cuyo honor no le permitía seguir con aquella locura de magia negra, traicionó a Virgilio llevándose el ansiado grimorio y algunos más que estaban en posesión de su antiguo compañero.
Devir consiguió dar esquinazo a Virgilio durante 40 años, en los que aprovechó para sentar la cabeza y formar una pacífica familia, lejos de todo el mal que había echo en su pasado.
Pero nadie es capaz de huir eternamente de la furia de Virgilio, Masoj ya lo sabía y ahora era el turno de Devir. Aprovechando el soplo de un estúpido de la familia, Virgilio dio con su antiguo compañero y se cobró la venganza que tanto había añorado. Saciada su sed de sangre, necesitaba saciar ahora su apetito de saber. Quería recuperar su preciado libro, el Necronomicon… pero no apareció por ningún lado. Disgustado y furioso, abandonó la carnicería que había producido sin saber que a sus espaldas había dejado una venganza y un propósito sin cumplir: No toda la familia Volkov había sido asesinada y junto al último vestigio de aquella destrozada familia se hallaba el Necronomicon…

- Temores: No conseguir ninguno de los propósitos que se dicte.

- Casa (lugar donde está situada): una pequeña choza en Alemania