Mi acogedora casa.

Vivo en una pequeña colina, no muy lejos de la ciudad, de hecho las vistas dan a ésta misma y al grandioso puerto de Nápoles, donde todo es tranquilo, donde la vida es apacible y la diversidad abrumadora. Ésta ciudad en un principio sólo era para mercaderes, negociantes con las indias, África y las Américas; navegantes y pescadores llenaban estas calles. La ciudad estaba dispuesta para personas de altos negocios y grandes hacendados, y con casas en el campo y en las playas, residencias de vacaciones y veranos era lo más típico en esta preciosa ciudad.
La vista desde mi casa.

otra vista del grandioso mar.

un precioso cuadro de la vieja nápoles.

y esta es mi pequeña y perfecta casita con su perfecto jardín.

Las dos únicas habitaciones de la casa. (invitados)
(principal)

- La pequeña cocina.
y la salita de estar.
escaleras a la parte superior de la casa.